Ritual de bienvenida

Sé que una vez que llega tu joya o cristal a casa, lo primero que deseas hacer es ponértela, sentirla tuya, dándole la bienvenida a tu vida. Pero también tendrás que tener en cuenta ciertos ejercicios de mantenimiento energético de la misma. Aquí te dejo unos pequeños pasos rápidos sobre cómo hacerlo:

LIMPIEZA:

La joya esta compuesta de un mineral, y éste, ha pasado por muchas manos para llegar hasta ti. Los minerales almacenan información condensada en energía, y pueden ser influenciados por la intención de una persona o la energía de un lugar. Para ello, hay que limpiar energéticamente al cristal antes de usarlo. 

Recomiendo dejar la joya o el mineral bajo el agua fría de un grifo, río, o mar unos segundos, poniendo la intención de liberar al cristal de cualquier energía o impregnación que pudiera tener para dejarlo en estado "neutro".
Ten en cuenta que cristales como la pirita, lapislázuli, fluorita, malaquita, selenita, malaquita o celestina no pueden sumergirse en agua. Por lo tanto, puedes ahumar la joya con el humo de un incienso, salvia o Palo Santo. 

PROGRAMACIÓN:

Ahora es cuando viene la parte más sensible y mágica. Programa tu cristal o joya con la intención que tú desees. Tan sólo basta con colocarlo entre tus manos y con tu intención y algún decreto, tu cristal estará listo para llevar contigo a cabo ese cometido. No hay una fórmula, hazlo como tú lo sientas.